La guerra entre los verdes
El Partido Verde en San Luis Potosí vive una autentica etapa de canibalismo político y los pésimos resultados electorales demuestran que el desgaste de este instituto político es grande.
Para la realización de este reportaje, recurrimos a varias fuentes al interior de este partido político y que por asó haberlo solicitado, omitiremos sus nombres y referencias personales.
En las pasadas elecciones, como sucedió a nivel nacional realizó una alianza con el PRI, en San Luis Potosí esta se realizó elementalmente para la gubernatura, la alcaldía capitalina y algunas diputaciones.
Sin embargo, el Partido Verde jugó dos cartas, por un lado dividió a un equipo para apoyar al abanderado tricolor al gobierno estatal Juan Manuel Carreras y al candidato a la alcaldía Manuel “Meme” Lozano, y por el otro apoyó a Fernando Pérez Espinoza “Calolo” y a Ricardo Gallardo; así jugarían a ganar-ganar, para negociar posiciones y seguir viviendo del dinero público.
Por parte del pelotón que apoyaría al PRI estaban : el Presidente Estatal Manuel Barrera, su esposa Ivett Salazar y su brazo derecho Sergio Oviedo , mientras que por el otro bando, que apoyó al PRD y partidos de izquierda están el Diputado Jorge Aurelio Álvarez y Jorge Aurelio Castillo, su “asistente”, Benjamín Ustoa y Héctor Alemán Ambriz.
Jorge Aurelio Álvarez, se cambio de bando.
El primer equipo jugó en el papel institucional, el dirigente del PVEM en el Estado de SLP, la ex delegada de SEMARNAT y el secretario de SEGAM del Gobierno de Toranzo, ellos representaban la cara de los verdes para negociar con el PRI en esta elección.
Sin embargo, están los que no salen mucho a la luz pública, y menos después del golpe mediático que sufrió el “reculo” Diputado Jorge Álvarez y su equipo, puesto que el escándalo de corrupción lo hizo renunciar a la dirigencia del verde. Por su gran cercanía con Fernando Pérez, fue nombrado su Coordinador de campaña sin que esto tuviera una repercusión estatutaria.
Jorge Castillo uno de los incondicionales de Álvarez Cruz cuando este dirigía al partido del tucán, llegó a embolsarse más de cien mil pesos mensuales, se convirtió en un izquierdista de “hueso colorado”, hasta el extremo de presumir al “Che Guevera” en sus redes sociales y mostrar abiertamente sus preferencias por el candidato del PRD.
La serie de situaciones donde estuvo inmerso el Partido Verde, desde los viajes a Japón utilizando una organización civil de nombre Reiyukai para triangular grandes recursos económicos desde el Congreso hasta la serie de actos de corrupción del equipo del Diputado Jorge Álvarez, generó un gran desprestigió en los electores, los cuales se lo cobraron en las urnas.
Manuel Barrera, sobreviviendo a cualquier precio.
Actualmente, dentro del Partido Verde continua la guerra intestina entre sus miembros. Algunos se sintieron traicionados por el apoyo de unos militantes al PRD y otros se decepcionaron de los resultados electorales y reparten culpan de la debacle.
Uno de los que en su momento recriminó sus actitudes a sus compañeros, fue Daniel González, diputado suplente de Jorge Álvarez, que duró un breve tiempo durante la ausencia del propietario en el Congreso, pero pronto le quitaron la inconformidad al ser nombrado como primera opción para una regiduría en el Ayuntamiento de Manuel “Meme” Lozano y se disciplinó.
Los allegados a Manuel Barrera se quedaron con las ganas de seguir viviendo del erario y ni Daniel González o Ivett Salazar, ya que no consiguieron los votos suficientes para ganar un puesto.
En la derrota, ahora si Daniel González hizo la rabieta de su vida porque se sentía ganado, y empezó a despotricar contra todos.
El Partido Verde, seguramente a través de Sergio Oviedo y Manuel Barrera, buscarán negociar con el próximo gobernador de SLP, Juan Manuel Carreras algún puesto público para asegurar mínimo otros seis años de la SEGAM o alguna otra dependencia estatal o federal o mínimo en el Interapas, siendo que en el fondo sabían que el apoyo fue a medias y casi nulo.
De nada sirvió en San Luis Potosí la violación sistemática de la ley electoral del Verde para meter miles de anuncios en cine, repartir tarjetas, mochilas y kit´s escolares, ya que los resultados fueron catastróficos.
Únicamente lograron por la vía plurinominal un diputación local, y que para variar nuevamente será asignada para su dirigente estatal Manuel Barrera, no lograron ningún regidor en la capital tunera, en cambio en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, alcanzaron una regiduría para Araceli Martínez (que por cierto es comadre de Jorge Álvarez), cosa rara , en tierra perredista si ganan los verdes; otros cuantos regidores más en municipios, y en el municipio de Venado funcionó el reparto de despensas y tinacos del otro diputado “reculo” Martín Álvarez.
Resultados pobres que demuestran que la ciudadanía ya no cree en sus propuestas.
Sara Catalina Ramos Reyna otra de las incondicionales de Jorge Álvarez está desesperada sea colocada en un nuevo puesto público, ya que para personas que no están acostumbradas a ganarse el dinero honestamente, es casi la muerte quedarse fuera del presupuesto.
Pronto veremos el desenlace de este episodio, donde la guerra entre los dos bandos verdes buscan a toda costa arañar los espacios que el sistema deja abiertos a los parásitos.