El triángulo del encubrimiento

23.05.2016 13:43

El día de hoy, señalaremos, al clan integrado por este triángulo del encubrimiento que tienen en el poder el control de los bienes del gobierno municipal, del estado y del congreso del estado

Estos son Enrique Alfonso Obregón, José Gabriel Rosillo Iglesias y el entonces tesorero; José de Jesús Martínez Loredo, quienes trabajaron juntos en la tesorería del Estado; en tiempos del entonces gobernador Horacio Sánchez Unzueta. Los dos primeros estudiaron juntos la misma carrera y hasta en la misma Universidad. Ahora los tres se encargan del control público, uno municipal, otro en general y otro del estatal. Estos tres personajes cumplen perfectamente la labor para lo cual fueron colocados al frente de los tres organismos de vigilancia: solapar y encubrir la terrible corrupción que se vive con los recursos públicos.

¿Quién es Enrique Alfonso Obregón?

Este licenciado de origen huasteco, que no tiene nada de servidor público, más bien de clavador de colmillo en las arcas del estado, inicio sus escaramusas en la Secretaría de Salud, cuando amablemente el Dr. Fernando Toranzo lo pone al frente de la contraloría interna, donde demuestra su incapacidad e ineptitud al desconocer todo lo relacionado al control público, sin embargo, su buena amistad con el Doctor, le permite continuar como director dentro del área de recursos materiales, donde también fue manejando otras áreas como la de compras, almacenes y servicios generales.

Pero tarde quizá, se dan cuenta que los medicamentes y materiales, se fueron muy altos de precios, y se recibían de muy mala calidad en los almacenes, así como los gastos por uso de combustibles se triplicaron, y el mantenimiento mecánico de los vehículow se volvió negocio para uno solo. Si, efectivamente cuando los encargados de las áreas, empezaron a quejarse, salió a flote el nombre del que autorizaba todos esos gastos sin ton ni son: Enrique Alfonso Obregón.

Tal fue el castigo que recibió que lo corrieron de la SSA (claro, sin regresar ni un peso), y no obstante, el Dr. Toranzo no le permitió ocupar ningún cargo durante su sexenio como gobernador. Estaba vetado para todo su gabinete, dentro de la administración pública estatal.

Por lo anterior, se tuvo que refugiar con otro igual que él, claro, le atinaron, con el ex tesorero municipal  Agustín Soberón, aquel que coordinó las trincuñuelas de Victoria Labastida (pero esa es otra historia). Enrique Obregón, recibe de su padrino Soberón nada más y nada menos, que el mejor regalo que le puedes dar a sujeto sin ética y escrúpulos ; lo nombró encargado de la Caja General, durante su periodo municipal. Y como dice la frase “Los lobos cuidando la carne fresca”, Enrique Alfonso y su padrino Soberón hicieron su agosto al costo.

Ahora Enrique Alfonso, entra como contralor municipal; propuesto por el PRI, según la reforma a la  Ley Orgánica del Municipio Libre (art 31-C II), donde se establece que para nombrar al Contralor Interno Municipal, será a propuesta de los regidores que constituyan la primera minoría, que en este caso son de Partido Revolucionario Institucional.

¿Realmente los integrantes del PRI, estarán consientes que con la incapacidad e ignorancia de este sujeto, solo le están engordando el caldo al Sr. Gallardo para ser el próximo gobernador del PRD en el estado? Como mencionamos en otra publicación, al solaparle compras fraccionadas por 35 millones en medicamento, además de los súper gastos no comprobados por el famoso festival del la cantera, y otro más, el mismo PRI está cooperando con el recurso de la campaña con mucha Gallardia. Señores del PRI, con Enrique Alfonso Obregón como amigo, para que quieren enemigos.

 

¿Quien es José Gabriel Rosillo Iglesias?

Quizá sea el único de los tres que cuenta con estudios que lo respalden, ya que tiene la maestría en Administración Pública; sin embargo, su curriculum dentro de la administración pública, deja mucho que desear, ya que solo ha sido Director de Planeación en la Secretaría de Economía durante el año 2005, y Subdelegado de Planeación y Fomento Sectorial, de la SEMARNAT del 2005 al 2015. ¿y en áreas de Control Público? Pues nada, como lo escucha, tenemos un Contralor, que nunca ha estado vinculado con el área de control público, ni municipales, ni estatales ni federales.

Pero eso sí, es muy cercano al Gobernador Juan Manuel Carreras, ya que en tiempo de José De Jesús Jiménez como Tesorero del Estado, Rosillo Iglesias al ser su secretario particular, hacían mancuerna con el actual mandatario estatal, quien era parte del gabinete del entonces gobernador Sánchez Unzueta. Favores con favores se pagan.

Lo que si le sobra al Maestro Rosillo, es cola que le pisen. Tan solo por mencionar que su esposa, la Contadora Miriam Ivonne Pérez Guerrero, fue sin más ni menos, el brazo derecho del anterior secretario de finanzas, el corrupto C.P. Jesús Conde Mejía. Y esta historia nace desde que el contador Conde se desempeñaba como contralor del Estado, y continúa más adelante cuando lo nombran Tesorero Municipal, llevándose a la Contadora Pérez Guerrero a que le manejara todos los gastos de las áreas de desarrollo social, (sería bueno preguntar como le fue al ex director Alberto Elías) donde se tomó todas las atribuciones del área que no le correspondían. Pero la historia no concluye ahí, la esposa del actual contralor, fue nombrada coordinadora administrativa de la extinta Contaduría Mayor de Hacienda del Congreso (ahora Auditoría Superior), donde se desempeño como la ama suprema y reyna de la decisiones de todas las cuentas públicas del estado, por supuesto, avalada por su gurú el Contador Conde Mejía.

¿Cómo podrá un contralor del estado fiscalizar las cuentas públicas del gobierno anterior, si su esposa, era la que tomaba todas las decisiones dentro de la secretaría de finanzas? Ella también se desempeñó para correr y mover a cuanto personal le daba en gana (hasta que el sindicato le puso un alto), además de pagar o negar los cheques a cuanto proveedor fuera de su agrado, o peor aún, de solapar todas las aberraciones que existieron dentro del sexenio anterior.

 

¿Quien es José de Jesús Martínez Loredo?

Este es el peor de los tres, ya que desde que llegó a la auditoría superior, permitió que sus allegados; los que que deben ser el ejemplo para la sociedad, no cuenten ni siquiera con carrera profesional mucho menos con estudios a nivel de maestría o doctorado, pero eso sí, reciben sueldos como secretarios o jefes de estado, y como ejemplo está su cercano allegado Humberto Perez Castillo, a quién le creó la coordinación del despacho, que ni el ex Auditor Héctor Mayorga en sus épocas de opulencia se dio el lujo de tener.

Ex Socio profesional de Cándido Ochoa, que precisamente logró imponerlo como Auditor Superior del Estado para blanquear y encubrir todos los malos manejos del Gobierno de Fernando Toranzo.

Al Auditor, según sus trabajadores,  se le van las ideas de la cabeza, ya que puede usted convenir el día de hoy algo con él, y mañana ya no se acuerda de nada, lo que aprovecha su nefasto clan para tomar ventaja y decidir para manipular y maquillar las cuentas públicas.

José de Jesús Martínez Loredo, es una muestra más de la nefasta situación que vive el congreso del estado, donde por cierto se dice que es un pueblo sin Ley, ya que ni a su misma gente le hacen caso, para que las observaciones detectadas en las auditorías, se utilicen y se apliquen las sanciones correspondientes.

Estas tres personas se han dedicado a dañar terriblemente a las instituciones, han logrado maquillar la corrupción y han alimentado las peores formas de saquear los recursos públicos.

Por cierto, ya no hay observaciones que darle seguimiento de la era del exgobernador Fernando Toranzo. Como por arte de magia, ya desaparecieron.