Depredación ecológica, depredación política

18.06.2014 12:56

EL PARTIDO VERDE ESTA CONTAMINADO

Parte Dos

Por : Gustavo Aviña Cerecer

La calidad de vida de los potosinos, sin duda, se ve severamente afectada sobre todo porque los tres poderes de gobierno locales, el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial en tanto empleados del Estado no están cumpliendo con las obligaciones que deben de cumplir para el desarrollo social y no el beneficio personal. Por lo mismo y por otras razones culturales y sociales también es cierto que hay una preocupante falta de visibilidad y sensibilidad de la población en general para con el medio ambiente y con todo lo que implica la naturaleza.

 

Podemos decir que las políticas en torno al medio ambiente y al equilibrio ecológico, lejos de tener como prioridad la comprobación de la inteligencia emocional animal y de las posibles prohibiciones del uso de animales en los circos o de un pretexto para “conmemorar” días internacionales como el día del Medio Ambiente regalando un árbol, deben de ser políticas para la investigación y el cambio social dirigido, además de la implementación de políticas legislativas y judiciales que efectivamente protejan el medio ambiente en el que vivimos.

 

El medio ambiente es la casa dentro de la cual en realidad habitamos como comunidad, es la ciudad misma; el aire que  todos respiramos, el agua que nuestros padres y nuestros hijos beben, la tierra sobre la cual asentamos nuestras casas, el hogar que nos mantiene cálidos para mantener la salud y la vida. Pero aún podemos entender mejor al medio ambiente a la manera de nuestros pueblos indígenas, para quienes la naturaleza es “la madre tierra”, una especie de extensión corporal protectora de la cual depende nuestra vida, por la cual a riesgo de sufrir enfermedad, muerte y destrucción es necesario respetarle, cuidarle y protegerle.

 

Dada esta máxima importancia del cuidado del medio ambiente, me pregunto con preocupación, ¿por qué la clase política potosina y los profesores al servicio del Estado, sobre todo de Educación Superior no están haciendo nada para en los hechos contener, disminuir y restituir el equilibrio ecológico de la ZMM SLP-SGS?, ¿por qué desde hace décadas están quemando hule y plásticos en las ladrilleras de las “Terceras” y en muchas otras ladrilleras de la ciudad?, ¿por qué hay basureros clandestinos alrededor de la ciudad, en los que se vierten desechos sin ningún control sanitario?, ¿por qué se permite la quema de basura en general como si no tuviera ninguna consecuencia respirar, beber, comer cantidades milimétricas de desechos industriales y por qué estos junto con los desechos humanos son vertidos, después de deficientes plantas de tratamiento, sobre la población de SGS sin ningún cuidado o restricción?, Allí está el caso de la empresa APELSA. ¿Por qué no se invierte dinero en un sistema de drenaje que no permita que las calles y avenidas se inunden, provocando no baches sino cráteres en las calles, además de la erosión de los suelos con el consecuente incremento en el inundamiento de las vías de comunicación y la pérdida de captación de agua por parte de los mantos freáticos?

 

El ex Diputado Jorge Álvarez Cruz, del PVEM, partido cuya supuesta vocación supone ser el cuidado del medio ambiente en enero de esto año dijo que en su partido estaban en la fase de estudio para ver qué podían hacer para que en SLP se cumpliera la legislación en materia ambiental. Acertado reconocer que aquí no se cumplen las leyes para el cuidado del medio ambiente y el equilibrio ecológico, pero muy probablemente todos podemos coincidir en que, desafortunadamente, por el carácter de las redes de corrupción de nuestra partidocracia, nos quedaremos esperando esa legislación que entre muchas otras acciones obligue a que los municipios paguen sus multas por permitir los basureros clandestinos, que los industriales apliquen severos mecanismos de control sobre sus desechos vertidos al aire y al agua, que los ciudadanos, cada uno con nuestra gente más cercana promovamos la cultura del respeto y cuidado de la naturaleza con el fin de lograr el equilibrio ecológico.